OKUPACION Y DERRIBO Por Santiago Durán

Santiago Duran García PROYECTOS Leave a Comment

Hace unos meses hablábamos de la “OKUPACION” como un fenómeno dañino y lucrativo, para unos cuantos, a costa del trabajo y sufrimiento diario de muchos otros.
Hoy les mostraremos lo que puede ocasionar no poder freno o no denunciar, el fenómeno de la “OKUPACION”, o su permisividad por los ayuntamientos.
El caso que traemos es el de una nave industrial, en un polígono con industrias similares, en una población del entorno de Madrid. Esta nave ha desempeñado el papel de sede de una empresa, un centro productivo donde los empresarios y trabajadores acudían todos los días, pagaban sus impuestos y alimentaban a sus familias.
La crisis pudo llevarse por delante esta empresa, pero su patrimonio seguía allí, sus construcciones, sus instalaciones, listas para que otra empresa comprara este solar, con una nave de 2000 m² y unas oficinas de otros 500 m² en dos plantas. El sitio perfecto para que una PYME se instalase.
En las fotografías vemos una foto aérea de cómo los edificios se van deteriorando, debido a fenómenos de vandalismo y “ocupación”.

Parcela Octubre de 2014 y Parcela Julio de 2015 (foto Aérea Google Earth)

De las fotografías aéreas se desprende que entre octubre de 2014 (en el que aparentemente esta la parcela totalmente construida) y octubre de 2015 tienen lugar las demoliciones por colapso de la estructura al retirarse los elementos metálicos sustentantes, produciéndose también la retirada de elementos de cubierta metálica.
En la foto aérea desaparece ante nuestros ojos la marquesina de la entrada, la cubierta y finalmente incluso la misma nave, desde dentro y hacia afuera, casi en un abrir y cerrar de ojos.

Parcela Octubre de 2015 y Parcela Agosto 2016 (foto Aérea Google Earth)

Esto es lo que queda en el espacio entre las naves, escombros y sólo escombros. El método de demolición, según se desprende de las fotografías es bien sencillo, grandes cadenas, camiones trabajando de noche y arrancando los pilares metálicos, haciendo que la estructura colapse y se hunda la nave, de manera que se puede acceder a desmontar los elementos de acero de la cubierta, las vigas metálicas, y arrancados de las paredes los pilares de acero.

Imágenes de los escombros donde anteriormente hubo una nave insdustrial

Además de la suciedad existente por doquier, los cables quemados para obtener el cobre, las ratas, existe incluso una zona con peligro de demolición. Los chavales que se puedan acercar a trastear, están en riesgo de pincharse, caerse, y de que una pared de 5 m. se les caiga encima (ver foto).

Todo esto, tras la retirada del soporte metálico, está en el aire, y en algún momento se caerá, esperemos que no pille a nadie debajo

En el edificio de oficinas el panorama es aún más desolador, se han arrancado los techos para “reciclar” su estructura, se han arrancado las ventanas, las puertas, las instalaciones dejando huecos en las paredes, las barandillas, ….todo un parque temático para cualquiera que quiera probarse siendo menor de edad, y desde luego un riesgo para todos.
A continuación se adjunta reportaje fotográfico con el estado los dos edificios hacia ambas calles y el espacio entre ellos, anteriormente ocupado por edificación.

Imágenes de la nave que queda en pié, ya que su estructura de hormigón y cubierta de uralita no la hacen atractiva a la demolición, aunque se encuentra totalmente saqueada

Si se fijan en las imágenes, la mayor parte de este destrozo ha sucedido en menos de un año (de octubre de un año a julio del siguiente), , según los testigos casi en un verano, noche tras noche, demolición tras demolición. Lo que era un centro productivo con más de 2500 m², con un edificio de oficinas, aparcamiento, maquinaria, instalaciones.

Imágenes del edificio de oficinas, dentro de la misma parcela

Todo eso se ha ido a la ruina, aún más, la mezcla de escombros hará que sea mucho más difícil recuperar alguno de los residuos para su utilización, ya que ahora se incluyen colchones, televisores de los de tubo, detritos y basuras por doquier.
Aquí no volverá a trabajar nadie, ninguna empresa, ningún centro que dé de comer a sus trabajadores. Esto ha pasado en un año, ante la pasividad de las autoridades, ante la impotencia de la policía, ante la impunidad de los que se han lucrado destrozando el patrimonio ajeno, que no olvidemos, también es de todos.
Por que, si nadie trabaja ¿quién pagará los gastos? ¿Quién pagará impuestos? ¿Quién tendrá pensiones? Respóndanse ustedes mismos, y si van por la calle, si detectan una “okupación y derribo” paseando el perro, DENUNCIEN.

Santiago Durán García
Arquitecto Técnico (UPM)
MDI Máster En Dirección Inmobiliaria (UPM)
EEM Gestor Energético Europeo (UPM European Energy Manager)
M. 618.519.717
www.sduran.es /santiagodurangarcia@gmail.com / s.duran@sduran.es

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